Ernesto tenía ganas de aventura, así que me llamó para ir a conocer el barranco de las foces del río Infierno. Aunque sabíamos que este barranco se hacía, no habíamos encontrada nada de información de él por Internet. No debe ser muy frecuentado, pero encontramos un cintajo no demasiado viejo en un árbol y algunas anillas. No tiene mucha dificultad, se trata más bien de un barranco donde ir a pasárselo bien, con muchos toboganes y saltos de hasta diez metros. En los saltos grandes, primero bajaba uno de nosotros rapelando para ver como estaba la cosa y el otro saltaba. Llevamos una cuerda de 16 metros y otra de 40; la grande solo la tuvimos que utilizar en un rapel. Lo peor de todo es la longitud, entre 4 y 5 kilómetros en total, entre el inicio de las foces y el área recreativa de la Pesanca.
Las fotos son de Ernesto y mías.
El inicio de las foces, muy encañonado, y el primer rapel:
Uno de los múltiples saltos:
Si algo abunda en este barranco, son los toboganes:
El "canal" uno de los sitios más bonitos. Tiene un par de anillas para cuando haya mucho caudal:
Uno de los saltos de mayor altura (se puede rapelar desde un árbol)
El final en la Pesanca:
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