1 de Agosto. Había quedado con Troti para ir a la Cresta de los Portillines, pero las condiciones climatológicas fueron algo diferentes a lo esperado. La niebla estaba muy alta y no acababa de disiparse. Estuvimos esperando un buen rato en la Forqueta del Portillín, pero al no terminar de despejar dirigimos nuestros pasos hacia el Crestón del Pasu Malu y a ver que más se podía hacer por allí.
Por cierto, muchas de las fotos son de Troti; cada día estoy más vago para sacar la cámara.
Salimos de Tuiza ya envueltos en la niebla con la esperanza de superar la capa pasado el Meicín:
Llegamos a la Forqueta del Portillín y no termina de quitarse:
Aprovechamos para dar una vuelta por la zona; estuvimos tanteando un poco la cresta del Canalón Oscuro:
El Portillín Oriental parece despejar algo por su base. También estuvimos un rato por su base esperando un poco:
Pero como no termina de despejar y vemos cielo azul hacia el Crestón del Pasu Malu, hacia allí nos dirigimos en un rápido cambio de planes:
Hacia los Fontanes, también despejado:
Un rebeco en lo Joyos:
Empezamos a subir el Canalón del Buey y vemos como la niebla sube desde los Puertos de Agüeria. Los Portillines no terminan de despejar, así que seguimos hacia arriba:
¡Que pesado que se hace el Canalón!
Dejamos de lado Los Fontanes y tomamos la cresta en dirección al Crestón del Pasu Malu:
La cresta es muy afilada en varios sitios con algunos destrepes. El principal problema es la consistencia de la roca; tienes que palparlo todo antes de dar un paso:
Uno de los destrepes en la cresta:
Poco antes de llegar al Crestón, la cosa mejora algo:
El Crestón del Pasu Malu:
Subiendo:
Arriba:
Las Agujas Rojas:
Bajando:
Troti:
Comemos algo y flanqueamos hacia el Siete:
Algunas trepaducas:
Llegando al Siete:
Cima del Siete:
Bajamos a la horcada del Siete, estuvimos un buen rato “palpando” la vía de los Mierenses:
Teníamos algo de cacharrería que habíamos llevado para los Portillines, pero nos faltba algo esencial, los gatos. Probamos a subir unos metros con botas, y curiosamente los primeros 2 ó 3 metros, con un ligero desplome son los que mejor subimos ya que hay buenas presas. A partir del primer spit la pared ya empieza a tumbar pero también es más lisa. Algo me dice que hoy no es el día: algo de niebla, no tenemos gatos, solo unos pocos empotradores. Ya volveremos con más calma a hacer esta bonita vía:
Tiramos hacia los otros Castillines aunque no subiremos a ninguno, habíamos estado hace poco:
El Canalón hacia el segundo Castillín:
Entre los Castillines:
En la Pasada de la Puerta del Arco:
Completamente despejado hacia la Babia:
El Pico de Puerta del Arco:
En la fuente de Bachao vemos lo que pensamos es un tritón:
Bajamos envueltos en niebla hasta bien pasado el Meicín:
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