Martes 30 de Junio. La Diagonal de la Mesa, en Ubiña, es una de esas actividades de montaña tras las cual llevábamos ya algún tiempo y parece que al final hoy era el día. No teníamos mucho tiempo y ésta es una actividad corta, unas 5 horas tomándolo con muuuuuchaaa calma. Se preveía un día de calor y ésta discurre la mayor parte a la sombra, al ser cara oeste. El día sonaba a Diagonal.
Apenas habíamos encontrado información, unicamente unas pocas lineas en el libro "Ubiña Alta Montaña" de Juan Delgado, pero a parte de ésto, nada por Internet, excepto pequeños comentarios. No hay ningún jito, pero si bastante rastro de pisadas, incluso de sendero, por lo que se debe de realizar con bastante frecuencia a pesar de la poca información existente.
Las fotos son de Pedro y mías.
Dejamos el coche un poco pasado el puerto de la Cubilla y vamos camino de la mesa. Deberemos de encontrar la ancha brecha en la cara sur de la mesa para comenzar a bajar. La brecha estaría donde marca la flecha:
Enseguida comienzan los destrepes:
Llegando abajo nos encontramos con esta instalación de rapel. Clavo y chapa. El clavo se mueve, pero la chapa parece segura. Hay una cuerda fija, pero no tiene muy buena pinta:
El rapel serán unos 15 metros, pero aprovechando que nos sobraba algo de cuerda, bajamos 30 metros y así libramos unos pequeños destrepes. Inmediatamente, ya vemos el inicio de la Diagonal y empezamos a subir:
Más hierba de la que nos gustaría con varias trepadas. Habíamos imaginado más roca:
Casi llegando arriba, encontramos la chimenea. En el libro de Juan Delgado, viene como un II+, pero debe de ser graduación "de la de antes" Normalmente, un II+ o un III- lo destrepamos sin grandes complicaciones, pero no sé si me atrevería a bajar por esta chimenea. Por otra parte, no se trata de una roca limpia, se encuentra sucia, con algo de tierra y hierba:
Nos lo replanteamos y echamos una cuerda:
Salimos de la chimenea. Solo nos queda una pequeña trepada hasta la cumbre:
Llegando a la cumbre:
Con las Ubiñas detrás:
Finalmente, bajaremos por la vía normal, donde hay pequeños destrepes:
Así es como se vería la Diagonal en su orientación oeste:
Y aquí con orientación suroeste:
Nota Importante
Nota Importante: Esto no es una guía, ni siquiera una recomendación; solamente se trata de una serie de experiencias y podría contener errores. Por favor, si quieres hacer alguna de las rutas aquí descritas, infórmate en guías oficiales y/o profesionales donde puedas conocer los riesgos y peligros de esta zona.
martes, 30 de junio de 2015
sábado, 20 de junio de 2015
Del Tapinón al Siegalavá
Sábado 20 de Junio. Pedro, Rocío, Trasgu y yo mismo nos fuimos hasta Tuiza, en principio sin una idea muy clara, más bien como otras veces, ir hasta allí, ver el panorama y pensar en algo que hacer. En esta ocasión, elegimos la cresta que separa el Tapinón del Siegalavá, la cual todos la teníamos pendiente y ya había salido en anteriores conversaciones.
La cresta, abierta en 1943 por E.Martínez y E.Ribera, como ya es habitual en Ubiña tiene la roca bastante descompuesta. Hay que extremar las precauciones en todo momento debido a la baja calidad de la roca y la consecuente caída de piedras. El casco es imprescindible.
Las fotos son de todos.
Salimos de Tuiza camino de la collada del Viso, bastante temprano para aprovechar las horas más frescas en la subida al Tapinón:
Antes de llegar al Viso, nos desviamos para subir por las Colgás, donde un bonito sendero nos lleva a la base del Tapinón:
Subiendo por las Colgás:
Ya en el Tapinón, vemos el Siegalavá, delante de Ubiña la grande y el cresterío hasta los Fontanes:
Vamos hasta el final del Tapinón y enseguida vemos la canal por la que descenderemos. Destrepamos unos pocos metros hasta el primer rapel. Dividimos el rapel en dos, de 15 y 30 metros, ambos con cordinos lazados en bloques. La primera parte se podría destrepar sin mucha dificultad, pero la mala calidad de la roca hace que nos decidiéramos por el rapel. La segunda parte ya es más complicada, con un rapel ligeramente volado. En ambos casos, el mayor riesgo está en la posible caída de piedras por los movimientos de la cuerda:
Primer rapel. Con una cuerda de 30 metros:
Segundo rapel. Dos cuerdas de 30 metros:
Aquí, donde terminamos de rapelar, vemos a la izquierda de la foto la canaleta que deberíamos de tomar para subir a la cresta. No tiene ningún jito:
Nosotros nos confundimos; se intuía un sendero bajando por la canal, por lo que bajamos otros 100 metros hasta que tomamos un hombro a nuestra derecha para subir de nuevo a la cresta. Al darnos cuenta de nuestro error, dejamos las mochilas y repetimos el recorrido, esta vez ya por el itinerario correcto:
Recogemos las mochilas y continuamos por la cresta. Pasos aislados de II+/III-:
Algunos pasos, como esta vira, son verdaderamente espectaculares:
Ultimas trepadas para subir ya al Siegalavá:
Ya en el Siegalavá, vemos la cumbre del Tapinón:
En la cima. Apenas hay aire, pero el calor tampoco es excesivo. Excelente día para hacer montaña:
Bajando del Siegalavá. Malditas praderías. Resbalones y culadas casi continuas en algunos sitios. Por algo se dice "resbala tanto como la hierba del Siegalavá"
La cresta, abierta en 1943 por E.Martínez y E.Ribera, como ya es habitual en Ubiña tiene la roca bastante descompuesta. Hay que extremar las precauciones en todo momento debido a la baja calidad de la roca y la consecuente caída de piedras. El casco es imprescindible.
Las fotos son de todos.
Salimos de Tuiza camino de la collada del Viso, bastante temprano para aprovechar las horas más frescas en la subida al Tapinón:
Antes de llegar al Viso, nos desviamos para subir por las Colgás, donde un bonito sendero nos lleva a la base del Tapinón:
Subiendo por las Colgás:
Ya en el Tapinón, vemos el Siegalavá, delante de Ubiña la grande y el cresterío hasta los Fontanes:
Vamos hasta el final del Tapinón y enseguida vemos la canal por la que descenderemos. Destrepamos unos pocos metros hasta el primer rapel. Dividimos el rapel en dos, de 15 y 30 metros, ambos con cordinos lazados en bloques. La primera parte se podría destrepar sin mucha dificultad, pero la mala calidad de la roca hace que nos decidiéramos por el rapel. La segunda parte ya es más complicada, con un rapel ligeramente volado. En ambos casos, el mayor riesgo está en la posible caída de piedras por los movimientos de la cuerda:
Primer rapel. Con una cuerda de 30 metros:
Segundo rapel. Dos cuerdas de 30 metros:
Aquí, donde terminamos de rapelar, vemos a la izquierda de la foto la canaleta que deberíamos de tomar para subir a la cresta. No tiene ningún jito:
Nosotros nos confundimos; se intuía un sendero bajando por la canal, por lo que bajamos otros 100 metros hasta que tomamos un hombro a nuestra derecha para subir de nuevo a la cresta. Al darnos cuenta de nuestro error, dejamos las mochilas y repetimos el recorrido, esta vez ya por el itinerario correcto:
Recogemos las mochilas y continuamos por la cresta. Pasos aislados de II+/III-:
Algunos pasos, como esta vira, son verdaderamente espectaculares:
Ultimas trepadas para subir ya al Siegalavá:
Ya en el Siegalavá, vemos la cumbre del Tapinón:
En la cima. Apenas hay aire, pero el calor tampoco es excesivo. Excelente día para hacer montaña:
Bajando del Siegalavá. Malditas praderías. Resbalones y culadas casi continuas en algunos sitios. Por algo se dice "resbala tanto como la hierba del Siegalavá"
sábado, 6 de junio de 2015
Barranco de Cacabillos
Sábado 6 de Junio. Previsiones de tiempo bastante malas en Asturias y muy buenas en León, así que estaba claro hacia donde nos teníamos que dirigir. En esta ocasión el lugar elegido fue el Barranco de Cacabillos, precioso barranco aunque relativamente corto, ideal para disfrutar de una mañana. Agua limpia, caudal suficiente y buen ambiente.
Enlace con los dados del barranco: Aquí. Las fotos son de Ernesto y mías.
Dejamos el coche pasado Caldas de Luna, en pequeño aparcamiento junto a la boca sur del túnel del Negrón y nos ponemos en camino siguiendo la ruta de las Brañas de Caldas, por un bonito bosque de robles y hayas:
Barranco encajado en sus inicios con un bonito ambiente:
En esta zona el barranco ya se empieza abrir por zona boscosa:
Enlace con los dados del barranco: Aquí. Las fotos son de Ernesto y mías.
Dejamos el coche pasado Caldas de Luna, en pequeño aparcamiento junto a la boca sur del túnel del Negrón y nos ponemos en camino siguiendo la ruta de las Brañas de Caldas, por un bonito bosque de robles y hayas:
Barranco encajado en sus inicios con un bonito ambiente:
En esta zona el barranco ya se empieza abrir por zona boscosa:
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